Comencé una de las intervenciones que refiero recientemente en NOSOLOLIBROS aclarando que la web 2.0 no democratiza, sino que populariza. Usar "democratizar" me parece un error léxico políticamente intencionado. Ya expuse una primera argumentación: un sistema basado en máquinas de entre cuatrocientos y mil euros que necesitan conexiones de costo aproximado a 50 euros mensuales no pueden considerarse en ningún momento democratizadoras ni democráticas ni demócratas. Ocurre, sin embargo, que esta "ilusión informática", que también esbocé, es obra de la clase media, y por etnocentrismo, llega a considerarse un acercamiento a la oligarquía o mesocracia, democracia. De todas formas el argumento principal es que las estructuras de poder no sufrirán merma ya que la participación del público en los entornos 2.0 es producto de la interactividad y no del ejercicio del poder que quedará en manos del mismo. Considerar que la web 2.0 es una democratización es casi lo mismo que pensar que la tiranía de la audiencia en televisión es igualmente un triunfo de la democracia.
Y viene este último ejemplo bien traido, porque aunque se hable mucho de inteligencia colectiva -dado que el trabajo se puede realizar en la máquina social con aportaciones de muchas personas que se benefician del producto final- nadie suele advertir que aquí "inteligencia" se refiere a una capacidad cuyo grado se desconoce y que puede no sólo ser cero, en lugar de 120, sino incluso negativo -si hace retroceder con errores costosos-, por lo que habría que hablar claramente de la posibilidad de una estupidez colectiva y avisar de sus peligros -ya que se avisa de los beneficios.
En suma, la web 2.0 dará probablemente a la web lo que el mundo capitalista occidental ya dio al papel: una gran clase media que comparte casi toda su información a título personal, una pequeña clase baja que no comparte información que no tiene, y una pequeñísima clase alta que no comparte toda la información que retiene.
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2 comentarios:
Buena entrada. Eché de menos esta reflexión en una charla sobre web 2.0 de Juan Quemada Vives (una pionero en la informática en España).
Lo malo es que a estos "flipados" de la tecnología la corrupción de los significados no parece preocuparles, lo mismo que los anglicismos como "bloguear".
Por una auténtica democratización de la Web Social, os emplazo a que consulten y, si quieren, participen en el proyecto De la Web 2.0 a la Web Libre y punto.
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